martes, 24 de noviembre de 2009

Mezclar, batir y colar

Después de poner a hervir todos los ingredientes que indicaba la receta, lo batí y lo pasé por el colador. Colgando de su red metálica quedaron las desconfianzas, los miedos, las inseguridades, las luchas internas, ... el resto reposa y toma consistencia en un molde cuya forma aún no puedo revelar. Lo probé, lo probé antes de ponerlo en el molde y aún navega su sabor por mi paladar.

3 comentarios:

Manuela dijo...

Suena el despertador, he dormido pocas horas pero me despierto con musica brasileña, ufff, otro nuevo dia y alla voy. Levanto la persiana y entra un rayito de sol...Lo presiento, hoy va a ser un buen dia.

Isabel dijo...

Esta receta además de buena, seguro alimenta.
Dentro de los puntos suspensivos ¿se podría añadir los prejuicios? más que nada por igualar los generos, es decir, el equilibrio, aunque si lo has probado seguro sabrá bien.

Abrazo

Manuela dijo...

Hoy me he lenvantado sin despertador, he corrido las cortinas y desde mi ventana tengo unas vistas espectaculares, estoy en Copenhague, veo un lago y 2 torres emblematicas de la ciudad, el dia esta gris y hace viento, pero fuera la gente va en bici y paseando, hoy de momento, no llueve, al fondo veo tambien el mar y los molinos eolicos.... es fantastico. Hoy tambien se que va a ser un buen dia