jueves, 2 de abril de 2009

Deseo impacientemente ...

... habitar en un cartabón
decorado a mi antojo:
un disfraz de Alicia al cruzar el umbral;
en el salón,
luz de velas que huele a naranja y canela,
un ajedrez de juego de suelo
y cientos de libros
sin orden ni concierto;
en la cocina,
olor a zanahorias, sandía y fresa,
sabor a café
y pan recién hecho;
en la habitación,
una manta de piel
y una mariposa que con movimiento pendular
le baile tangos a la luna,
única lámpara de techo,
como despertador, el sol,
en el armario,
toquilla naranja
y 1000 vestidos,
sobre la mesilla,
artilugios quitapenas
y girasoles.
Cartabón refugio de princesas traviesas y hadas,
de duendes y artistas invitados,
merendero para mentes inquietas y corazones blandos,
playa nudista de la luna,
epicentro de un sueño.

Tarareo de jueves "azul"




Iratxo "Barco en la botella" con Chaouen y Cifuentes


miércoles, 1 de abril de 2009

martes, 31 de marzo de 2009

Instrucciones para sanear un recuerdo

Llevo semanas recordándote de otra manera, algo que antes era imposible.
Hoy recordé cuando me enseñaste a andar en bici, en el puente Don Guarín.
Pensaba que me agarrabas del sillín y, realmente, hacía rato que me habías
soltado y yo andaba / volaba sola ... incluso me atreví a girarme para buscar
tu sonrisa... y no estabas... estaba volando sola, quedaba la confianza que
me diste, quedaba el camino que me mostraste, me pusiste en el lugar y
me soltaste cuando tenías que soltarme.
Pudiste ser muchas otras cosas pero fuiste mi padre y tu sabiduría sujeta mi
sillín para que yo pueda volar sola...
Amaso los recuerdos entre mis manos
y me doy cuenta
de que el tiempo ha sido la peor levadura,
ha hecho que todo tome un volumen
desproporcionado.
Mi impaciencia me impide esperar a que se enfríe
y, entonces,
me lo como de una sentada...
y acabo vomitándolo
en un lugar inadecuado.

lunes, 30 de marzo de 2009

48 menos 2


Viernes.Café de media tarde. Llegas tarde. ¿Animales salvajes sobre la pista? La taxista se des-pista. Sonido de vasos y "Platos rotos". Me descubro en un par de fotos, expuestas ante cien ojos y, de repente, vuela un beso, lo cazo y lo consumo, uno... Las letrajas de la servilleta de la noche de verano de mi 9 cumpleaños se convirtieron en canción. "Mas bien estamos en la mitad, en mitad del amor o del olvido". Me enveneno con ron miel. Ronronea la pregunta en mi cintura: "Carmela, ¿qué es eso de Perséfone?". Y repico: "¿Cuánto tiempo ha pasado desde la última luna llena? Don Juan no conoce a la diosa... ¡qué cosas!". Metimos al congelador el reloj y a la despensa el corazón. Entre tercios, tres diosas desmitifican a Don Juan y el bus se pasa la parada y recorre la M30 a altas horas de la madrugada, reímos porque no nos queda otra, festejamos la alegría de estar donde estamos y soñamos con los ojos abiertos de par en par (alerta). Sábado. Café con cereales y fresas. Esperamos al Hada y compartimos comida, café y risas. Sacamos brillo a un cosmos hecho de acero antihuellas. Si te atreves, ¡araña! Si no, pasarás a mejor vida. Domingo, 48 menos 2. Te llevas mi abrazo, aunque no te lo haya dado. Junio está a la vuelta de la esquina. Nos vemos en nuestros sueños, mientras tanto. "La primavera la sangre altera" y más risas de final de fin de semana de fin de mes de mitad ... mejor que lo escriba él. 46 horas nunca son suficientes, aún estoy digiriendo las distintas energías.
Ahora, a ti te imagino en tu rutina, con tu bici y tu sonrisa, y me río. Otros andarán aún dormidos.
*Gracias, Manuela, por tu contribución a la sensación de primavera.