- ¿Qué "me" haces?
- Zurcir los trozos de ti que voy encontrando atrapados entre las letras que hablan de ti.
- ¿Zurcir?
- Sí. Coger de aquí y de allá, buscar, ver dónde más o menos encajan, colocar sutilmente, casary zurcir.
- Ya decía yo que últimamente me sentía mejor.
- Por eso no dejo de repetirte que brillas...
- Ahora sé de dónde procede mi brillo. Llevaba tiempo perdiéndome, desgajándome trocito a trocito,desgajada mi sonrisa, descolgadas mis ganas de confiar, enterradas mis ganas de volar acompañada,exiliado el deseo de compartir noches y madrugadas ... fui dejando todos esos deseos, sueños,anhelos, pretendí olvidarlos entre letras aparentemente bien juntadas... Y llegó quien los fue recogiendotras de mi... esos pequeños garbanzos que contienen esa parte de mi que echaba de menos. Ahorala estoy recuperando y...
- Brillas.
- Aún no soy del todo consciente.
- Brillas. Te lo repetiré mil veces. No te hace falta Ella para brillar.
- Me acurruco en mi. Me abrazo e intento colar los dedos por esos huecos vacíos de mi misma quefueron dejando otros cuando se lo llevaron "casi" todo... y los huecos se han empequeñecido. Apenas cabenmis dedos meñiques... Zurcir.
- Tengo hilo y aguja para seguir.