miércoles, 6 de mayo de 2009

La vie en rose

Se despiertan 999 y 1 permanece dormida.
La zarandeo... ¡despierta! Me guiña el ojo
y, mientras se acurruca
y baja la persiana de nuevo, musita:
¡Déjame! Es importante que acabe de soñarlo...
Luego te lo cuento.
Mientras 444 se duchan y las otras 555
toman café,
la que sigue en la cama sonríe...
¡Déjame! Es importante que acabe de soñarlo...
Luego te lo cuento.
Nos hemos ido de casa y la hemos dejado
soñando...
Sonido de tambores.
"Gracias por dejarme dormir un ratito más".
Pero... ¿qué ha soñado? Las 999 se irritan
cual vecinas cotillas...
Y, ella, sonríe, se viste de rosa y responde:
(sonido de tambores)
"He soñado que la vida es sólo un ensayo
y en la versión final, en el estreno real,
no pierdo el tiempo haciendo tachones
aprendo a pintar de verdad".
Mientras 998 trabajan,
hay una que se desmarca y la sale al encuentro.
A saber por dónde andarán... seguro que respirando
algún parque
y contándose algún otro sueño...
Cada minuto que pasa, se va restando una de este lado
y se une a ellas...
ahora mismo ya son 4,
no, 5,
no...

No hay comentarios: